miércoles, 30 de diciembre de 2009

1981: En el BANCO VISITANTE, ALGUIEN que SIEMPRE fue LOCAL


Angel Labruna pisaba por primera vez el Monumental como DT de otro cuadro, después de haber sido reemplazado por Alfredo Di Stéfano en la conducción táctica del equipo. Era la fecha once del torneo Nacional 1981. River ganó 5 a 0 a Talleres de Córdoba en gran producción. La hinchada ovacionó a Angelito.

En la imagen, el tercer gol. Juan José López -en el fondo- tocó inteligentemente para la entrada de Emilio Commisso, quien dejó en el camino a Cuciuffo y definió de esta manera ante la cercanía del “Colorado” Vieta. Dos minutos después, llegaría el cuarto tanto: un golazo del Negro Jota Jota. Esa tarde, en la que se lució el defensor Alberto César Tarantini, la tribuna reflotó un viejo grito: “Hinchada, hinchada, hinchada hay una sola / hinchada la de River / que le rompe el c... a todas!”

El URUGUAYO BICA cumplía, cuando el PRÍNCIPE DORMÍA...


Mientras las interminables gestiones por Enzo Francescoli continuaban, River mostraba en Alberto Bica a un puntero derecho uruguayo de desborde, velocidad y llegada. No sobresalió, pero en ese turbulento equipo de 1983 dio más satisfacciones que el Príncipe, quien no lograba adaptarse y todavía no llevaba su fantástica figura recorriendo con honor el mundo entero...
En un cotejo igualado sin abrir el marcador ante mucho público frente a San Lorenzo, en el Monumental, Bica fue la figura del clásico imponiendo su rapidez y habilidad. A su marcador Enrique Hrabina le costó mucho detenerlo, como puede observarse en la imagen.
“Y dale dale Ri / y dale dale Ri / y dale dale / dale dale River...” gritaba casi todo el estadio cuando el Millonario lo tuvo acorralado al conjunto entonces dirigido por el Bambino Veira, pero no pudo quebrar el cero.
Al domingo siguiente, el Liberti presentaba un aspecto imponente: Francescoli debutaba en River con un triunfo ante Huracán. Enzo iba a hacer historia, mientras Bica finalmente no trascendería.

ALONSO, una BANDERA de RIVER sin BANDERA


A principios de los años ochenta, colgaban en las plateas bajas del Monumental esta bandera. ¿Raro, no?, porque en la mayoría de los partidos de River disputados en los inicios de esa y en casi toda la década anterior, el mediocampo estuvo integrado por el clásico “Jota Jota, Merlo y Alonso”, a los que se agregó posteriormente el “cuarto mosquetero”: Emilio Commisso. La revista “El Gráfico” de aquella época había hecho una producción fotográfica con esos jugadores, represesentando una parodia de los cuatro esgrimistas de la novela de Alejandro Dumas.

Los muchachos que hicieron este trapo no pudieron olvidarse del “Beto”: seguramente tuvieron una visión y sabrían que Alonso tendría un serio conflicto a fines del 81 con el entonces DT Alfredo Di Stéfano y que la Comisión Directiva de aquel entonces se inclinaría por el ídolo del Real Madrid...

lunes, 28 de diciembre de 2009

1975: “...TIENE los COLORES de RIVER CAMPEÓN”


Alejandro Sabella eludió a dos rivales y se dispone a rematar al arco de All Boys, en un cotejo que River ganó 1 a 0 en el Monumental correspondiente al Metropolitano de 1975. Más atrás, vestido todo de negro, el árbitro Arturo Iturralde.

En esa época, cuando Alonso y Sabella se juntaban nacían jugadas maravillosas que el público celebraba. Con el tiempo, Alejandro tuvo algunas diferencias con el entrenador Angel Labruna y fue transferido al Sheffield de Inglaterra, cuadro que tenía justamente la camiseta tricolor muy similar a la suplente de River que aparece en la imagen. “Estos colores me persiguen” dijo el talentoso mediocampista cuando llegó al club europeo.

Sabella también jugó en México y se destacó en el Estudiantes de La Plata campeón 82/83, cuando fue convocado a la Selección Argentina que conducía Bilardo de cara a México 86.

Luego, una vez retirado de la práctica activa del fútbol, fue la mano derecha de Daniel Passarella durante algunos años en la conducción táctica del club del Núñez. Con el rojo y blanco también, pero ahora desde el banco de suplentes como DT, dirigió al cuadro de Sebastián Verón que ganó la Copa Libertadores 2009 y que le hizo recientemente partido al Barcelona de Messi en la final del Mundial de Clubes...

1979: CUANDO el CLUB era ARUBA...


A fines de 1979 se realizaron elecciones en River. “Con Aragón, River campeón” era el lema de la lista del presidente en ejercicio, que volvió a ganar ampliamente como en el 77.

Entre los electos de los comicios del 79, figuraban como Vocales Titulares Osvaldo Di Carlo, Hugo Santilli y Alfredo Dávicce. River-fútbol y River-institución estaban en pleno esplendor. La gente gritaba: “Dale y dale River / dale dale campeóóón / y dale, y dale River / dale dale dale Ri...!” Pero en el último tramo la conducción de Aragón se vino abajo. Para 1982 y 1983 el club era “el peor de los mundos...”

1982: GOL del TEVEZ de RIVER a BOCA


Por la quinta fecha del Nacional 1982, River recibió a Boca en el Liberti. Nueve jugadores del plantel millonario habían quedado concentrados -por espacio de “sólo” cuatro meses- con la Selección Argentina de César Menotti de cara al Mundial de España, razón por la cual no pudieron formar parte del equipo. De todos modos, estaban suspendidos por la Comisión Directiva riverplatense: no se habían presentando a jugar en Mar del Plata poco tiempo atrás ante Peñarol en partido amistoso y fueron sancionados. En la misma situación quedaron “los suplentes” que no formaban parte del combinado nacional: Merlo, Commisso, Saporiti, De los Santos y Vieta.

En ese marco se presentó River a jugar contra los boquenses: con un equipo juvenil que no se pareció en nada al que en 1971 le ganó a Boca 3 a 1 en campo de Racing ni al que le sacó un empate a los xeneises en el Metropolitano de 1976, en cancha de Huracán.

A los 5 minutos de comenzado el “superclásico”, Randazzo (ahora en River) le quitó la pelota a Mouzo y alargó para Jorge Tévez, quien se escapó y con un derechazo puso el 1 a 0. Minutos después, River se perdió dos goles más. La hinchada se movía para acá y para allá: “Seguí bailando Boca / seguí bailando. / Seguí bailando que te vas a enloquecer...”

Fue un sueño que se hizo trizas. Ruggeri y Gareca (todavía en Boca) dieron vuelta el marcador antes de finalizar la primera etapa y luego el conjunto visitante hizo prevalecer su mayor experiencia y terminó ganando 5 a 1... Un resultado histórico del que pocos recuerdan, lamentablemente, el hecho de que River no jugó con los titulares. Un cachetazo a la estadística.